El equipo que no logró la hazaña: Rostov

El equipo que no logró la hazaña: Rostov

El Rostov fue una de las muchas sorpresas de la temproada.
Foto tomada de Google.

Esta historia llega muy tarde, o muy temprano, depende de cómo miren las cosas. Si se extiende una historia lo suficiente, esta deriva en la muerte o peor aún, en la rutina y la costumbre. Si deciden continuar con la lectura les prometo que vale la pena, hay problemas financieros, racismo, antidoping y hasta una supermodelo. 

 El caso del Rostov, parecía entrar en esta fórmula de “chicos que enfrentan a los grandes” sin embargo el desenlace de su historia –hasta donde dejaron de contar- acabó con el recordatorio de que los grandes suman a la vitrina y los chicos a la anécdota. 

El deporte ruso vive un mal momento en general. El escándalo de dopaje que involucra a miembros del gobierno de Rusia y los mantiene suspendidos de cualquier competición internacional en atletismo, incluidos los Juegos Olímpicos.

En el futbol, la historia de los rusos se mantiene en un gris recuerdo de una época a la cual se aleja cada vez más (y la cual tampoco fue muy brillante), las cosas no salen de un aspecto predecible desde la inauguración de la Liga Premier de Rusia en el 2002.

Desde ese año solo cuatro equipos se reparten todos los títulos de liga, el Lokomotiv, CSKA de Moscú, Zénit de San Pertersburgo y el Rubín Kazán se reparten los campeonatos, mientras que los históricos de las épocas de la Unión Soviética como el Spartak o el Dínamo son enterrados a la media tabla o al descenso, como es el caso del Dínamo.

Durante el mismo tiempo, el Rostov descendió una vez y permaneció sumido en esa parte gris de la media tabla.

“A veces conviene soñar” Dostoyevski

Durante la temporada 2003, el Rostov llegó a su primera final mientras estaba en la Liga Premier de Rusia, la perdieron ante el Spartak de Moscú, lo cual parecía una buena señal para el equipo o al menos eso pensaron los aficionados. 

Desde ahí, lo más cerca que estuvo el futbol de Rostov de un título nacional fue cuando la modelo ganadora de “Miss Rusia” en el 2003 originaria de la ciudad, Victoria Lopyreva  se convirtió en conductora del programa deportivo “Noche de Futbol” en el 2007, mismo año que el club perdió la categoría. 

Victoria Lopyreva, una de las "cracks" originarias de Rostov.
 Foto tomada de Google.

Un año después regresarían, pero seguirían metidos en la mediocridad, desde la temporada 2009-2010 en adelante, el Rostov estuvo en el catorceavo, trigésimo, décimo, noveno y séptimo lugar y jugó en dos ocasiones una promoción para salvarse del descenso.

En el 2014 ganarían la Copa de Rusia, en penales tras vencer al Krasnodar, ahora tenían un título nacional al igual que Lopyreva, quien probó suerte como Miss Europa sin mucha suerte, el Rostov  tuvo la oportunidad de jugar su primer partido en una competencia internacional ante el Trabzonspor de Turquía, en los playoffs de la  Europa League donde perdieron en el global 2-0.

Misma temporada en la que jugaronn su segunda promoción para mantenerse en el máximo circuito y finalizan en cuarto lugar. Hasta aquí, la historia del Rostov no es digna ni de ser mencionada en un cuento de Chéjov, aunque como el mismo escritor apuntaba, en la vida como en los cuentos existen los “de repente” que cambian la historia. 

Todo comenzó con una deuda

Después de ganar la Copa de Rusia, el técnico Miodrag Bózovic estuvo en la temporada 2014-2015 otros 12 juegos antes de ser despedido se dio a conocer que ni él ni sus jugadores cobraban su sueldo desde hacía varios meses. 

La respuesta de la directiva fue reemplazar a Bózovic por el ex jugador Igor Gamula como técnico, quien en 17 juegos consiguió apenas 11 puntos. Si los resultados de Gamula como entrenador eran malos, sus declaraciones fueron peores, previo a la apertura del mercado de invierno y con el virus del ébola como alerta mundial, el técnico declaró que “tenía suficientes jugadores de piel negra” que contaba con “seis de esas cosas” y que estaba preocupado por la propagación de la enfermedad.

Gamula primero fue suspendido por cinco juegos y después despedido. Su lugar lo tomaría uno de los técnicos más importantes de los últimos años en el futbol ruso, Kurban Berdyev, quien antes pasó 12 años con el Rubín Kazán, conjunto al cual ascendió, ganó dos títulos de liga y una copa, además de jugar Champions League.

Algunos aficionados blaugranas lo recordarán por el técnico que ganó en el 2009 al Barcelona en el Camp Nou 1-2. Y al cual bajo el mando de Berdyev enfrentaron en cuatro ocasiones y solo pudieron vencer una vez (las otras dos fueron empates).

Berdyev el valiente que tomó al Rostov. 
Foto tomada de Google.

Aunque Berdyev  se convirtió en el bombero del Rostov, el equipo seguía sumido en deudas y con el latente rumor de que los jugadores boicotearan el juego de promoción por la permanencia, que decidieron enviar juveniles, quienes lograron la victoria.

La deuda del Rostov llegó a los 10 millones de euros y para el invierno del 2015 al equipo se le prohibido realizar fichajes, pues aún debían el pago del préstamo realizado al Rubín Kazán por el joven iraní Sardar Azmoun para la temporada 2015-2016.

Dentro de todos estos problemas el Rostov era la revelación de la temporada con jugadores como César Navas, Sardar Azmoun, Christian Noboa, Bastos, Tomofei Margasov, se mantenía en la quinta posición a 10 puntos del líder CSKA.  Diez fechas después el Rostov los empató y rebasó por diferencia de goles.

En las diez jornadas restantes, el Rostov y el CSKA alternaron el liderato general, la sorpresa del Rostov les ganó el apodo del “Leicester ruso” aunque ellos no se consideraban iguales. El rendimiento del equipo llamó la atención de la FIFA que los llamó a todos a una prueba antidopaje sorpresa.

El jefe médico de la FIFA, Jiri Dvorak, dijo que se realizaron pruebas sobre el equipo titular para averiguar si tenían meldonium, sustancia a la cual dio positivo la tenista rusa, María Sharapova. El Rostov se defendió y argumentó que “aunque quisieran dopar a sus jugadores, no tenían dinero para comprar dicha sustancia”.

Antes de que se consumara el subcampeonato el Rostov encararía la Champions League en fase de grupos sin poder fichar, o eso parecía hasta que la UEFA les levantó el castigo para que pudieran realizar fichajes, las buenas noticias no pararon ahí, pues la FIFA descartó las posibilidades de dopaje.

En la última fecha, el Rostov venció al UFA, 2-1 sin embargo la victoria del CSKA 1-0 sobre el Rubín Kazán lo dejó a dos puntos del campeonato. Un segundo lugar no está mal para un equipo que según Transfermarkt  vale 40 millones de euros, comparados con los 131 millones que vale la plantilla de su rival moscovita, o los 196 millones del Zenit, que dejaron en el tercer puesto.

Ahora el Rostov podrá fichar para encarar la fase previa de Champions, el técnico Berdyev, se le ofreció resucitar al club más popular de Rusia, el Spartak de Moscú. El estratega se encuentra en pláticas (aficionados culés pueden respirar tranquilos) sin embargo, la idea de pelear la previa de Champions le atrae y se quedaría en Rostov con la condición de que se pagaran los salarios que se adeudan y se de una garantía de financiación.

Tal vez la historia del Rostov llegó demasiado tarde, o temprano para las fechas de la Champions League, cuando todo ya acabó, o aún no empieza.

Podemos concluir la historia aquí con algunos finales felices, hasta ahora el Rostov mantiene a su técnico y el dueño del PAOK de Grecia, Ivan Savvidis, quien tiene una residencia en Rostov (y fue presidente del equipo en el 2005) prestó dinero al equipo para liquidar algunas deudas.

Y ¿Qué fue de Victoria Lopyreva? Ahora ella es embajadora de la ciudad de Rostov para la FIFA como campaña de promoción del Mundial y apoya causas en favor de los niños. Como les dije, no importa si se cuenta tarde una historia, siempre y cuando se sepa cuando acabarla.

Con información de The Guardian, Diario AS, Russian Football News, Sport FM, Sovsports, Match TV, Transfermarkt y Championat.