Especies en extinción el “9 Tanque”

Especies en extinción el  “9 Tanque” 

Klose es de los últimos delanteros centro nominales. Foto: Tomada de Google

El futbol es guerra y también es amor, necesita tanto de estrategia como de talento, al igual que frialdad y sin duda “huevos”, “garra”, “coraje”, ganas o como gusten llamarlo. Esa cualidad se la pedimos al centro delantero, al que por lo general usa el número “9” en la espalda, alguien a quien el equipo pueda depositar su confianza para lograr eso que hace ganar los partidos, meter goles.

Ahora vivimos en el futbol la época del falso 9, donde los goles pueden producirse por los extremos, los mediocampistas, o los laterales, esa es la moda, en la que el “delantero centro es el espacio” como diría Pep Guardiola. 

Nos guste o no, el futbol no es el mismo de antes, esos delanteros centros de gran tamaño, con presencia de área, están en peligro de extinción. Y esto ya alcanzó hasta las retas del polideportivo.

Las razones son el cambio de las tácticas, las innovaciones (bueno, es que el falso 9 lo usaba Austria antes la Segunda Guerra Mundial pero mantengamos la ilusión de que es nuevo) la velocidad que se exige para jugar y que ahora los delanteros deben tener más funciones que los teléfonos inteligentes y hacer más que anotar.

“Para mí, un centro delantero tiene que moverse bien y hacerlo en un 4-4-2, un 4-3-3 o un 3-5-2. Es increíble que en Inglaterra no se les enseñe a los jóvenes a ser multifuncionales” se quejó José Mourinho.

Sin embargo, el estratega portugués también recurrió en su momento a usar un delantero “tanque” en algunos de sus equipos como Diego Milito en el Inter o Karim Benzema en el Madrid (aunque este último se ajusta más a los estándares del atacante moderno).

Y esto trae un problema o al menos eso apunta el técnico Claudio Borghi, “El hecho de que los futbolistas modernos deban saber cómo hacer de todo puede conducir a un cortocircuito, ya que hay jugadores buenos para muchas cosas pero no excelentes para una única habilidad”.

Campaña para la preservación

Este artículo no solo quiere llamar a la nostalgia y hacerles pensar en que “todo tiempo pasado fue mejor” y tampoco a admitir la superioridad de una táctica como doctrina absoluta, el propósito es realizar un llamado de conciencia para pedir la protección de una especie en extinción, la del “delantero tanque”.

Tener un referente de área no sobra en ningún equipo, aunque sea en la banca, pues cuando no tienes un presupuesto de 200 millones de dólares para intentar la posesión del balón todo el partido o un extremo que sea un mago, necesitarás uno de esos arietes que imponga, un delantero al que le puedas tirar centros y retenga la pelota, un “animal de gol” cómo describiría Diego Armando Maradona, a uno de los “9 tanques” por excelencia: Gabriel Batistuta.

Batigol, con una hermosa playera, delantero que imponía Foto:Google

“En mi época yo sabía cómo podía ayudar a mi equipo y estaba siempre enfocado a jugar de la manera más práctica posible” aseguró Batigol, el (hasta ahora) máximo anotador de la selección de Argentina decía que “no estaba interesado en el espectáculo” su prioridad era engañar a tres o cuatro defensas y anotar, “lo de menos era si el gol había sido hermoso o feo. Yo simplemente quería un gol” añadió.

Y esto se notaba, si no conocen a Batistuta, les recomiendo que busquen en Youtube una recopilación de sus goles con “Enter Sandman” de fondo, porque la canción acentúa más un rasgo: el tanque intimida al verlo jugar, en verdad parece que está en una guerra, un killer, (un matón, por si tienes fobia al inglés) y es que este jugador por lo general entra cuando todo se fue a la mierda, donde estamos para matar o morir.

El atacante de área debe tener la frialdad para definir y a la vez entrar al calor del partido en segundos para desquiciar al defensor. Con el carácter para aprovechar la que puede ser su única oportunidad.  

Un buen delantero tanque, sirve para marcar la diferencia en un momento crucial, puede ayudar a que el rival no adelante todas las líneas con libertad y es el primero en atacar cuando comienza la salida del enemigo. A este se les pide efectividad, definición, colocación, pero ante todo ANOTAR.

Ejemplos modernos quedan pocos, Aritz Aduriz, Adebayor, Marc Janko, Mario Gómez, Daniel Osvaldo, Alessandro Matri, Simone Zaza, Miroslav Klose, Felipe Caicedo, Roque Santacruz, Fernando Torres, Miller Bolaños, Didier Drogba y hasta Javier Hernández podría entrar.

Tengo que aclarar que varios de estos no son “tanques” en lo físico, pero cumplen funciones que realizan esta clase de atacantes, por lo cual los incluyo en esta categoría, mención de honor al recién retirado Luca Toni, que es un ejemplo de la extinción paulatina de esta estirpe.

¿Cómo salvar lo que parece insalvable?

Al igual que hicieron con las abejas, habrá que permitir que surjan híbridos y mantener a ciertos delanteros de este estilo en “cautiverio” en ligas o equipos donde se les respeta, la Serie A parece el área protegida más grande del delantero centro clásico.

Aceptar que estos estilos nuevos, como Luis Suárez, Edison Cavani, Zlatan Ibrahimovic, Radamel Falcao, Karim Benzema, Carlos Tévez, pueden convivir en el mismo tiempo que otros delanteros y que la efectividad determinará cuánto tiempo se mantendrá este nuevo estilo y al final el talento se impone, podrás tocar y dar la espalda pero si no resuelves de cara al arco de seguro vas a la banca.

¡Tú también puedes hacer tu parte desde tu torneo dominical! No desprecies a ese delantero pasado de peso que dura en el campo lo mismo que un equipo de San Marino en fase previa de Champions League.  Si éste aún puede driblarse a dos o tres y meter la única que va a tener en sus tres minutos para resolver el juego (y además paga el arbitraje completo) ayuda a conservarlo.

En conclusión, el tanque no morirá ni por la táctica y menos por la supuesta evolución del juego, solo lo hará si dejan de surgir los talentos para jugar en dicha posición. ¿Tienes alguna propuesta para otra especie en extinción?